contenido de la página Recuerdos de Arcadia: 2011

miércoles, 30 de noviembre de 2011

Andas buscando mi sonrisa,
mas buscas en vano.
Se la llevo una suave brisa
a un sitio muy lejano,
donde no existe amor,
caricias, cariño.
Tan solo los rescoldos
de un desamor,
los restos de un corazón
de tus recuerdos malherido.
Y soñar con tu mirada,
dulce, apasionada,
y beberla en un suspiro,
creer que deliro,
perderme un momento contigo,
ser algo más que un amigo.

Y ansiar tus besos,
morir por tus huesos,
sentir tus latidos
en mi pecho,
yacer en tu lecho,
curar mi corazón malherido.

martes, 29 de noviembre de 2011

Y si te vas,
Y me dejas abandonado
de ti,
de tu cuerpo,
me perderé,
como se pierde un chiquillo
en brazos de su madre,
y lloraré lágrimas silenciosas,
que proclamarán que te quise
como la brisa ama al inmenso mar,
tan puro,
tan inmenso,
como la huella indeleble que dejan en mi
tus besos,
tus abrazos,
mis recuerdos.

Ser Padre

Susurros que me desvelan
en medio de la noche,
risas infantiles, coloridas, deseadas.

Porque te quiero,
a ti, si a ti, amor mío,
desde que viniste a este mundo,
recuerdos que permanecerán,
en este corazón, por siempre.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Vivir un sueño,
soñar despierto,
estar a tu lado,
un solo momento.

Esa es mi vida,
un sueño dorado.
Una sombra me acecha,
aparece la sospecha
de que te quiero,
de que te amo.

Más no es una sospecha.
Es toda una certeza.
La pasión que por ti siento,
poco a poco, a ti me ata,
De que el veneno de tus besos,
¡Ay mi niña!
ese veneno a mi me mata.
Cuando no surgen las palabras,
cuando afloran los sentimientos,
cuando una simple caricia
remueve los cimientos
de mi existencia,
en ese instante,
levanto mi mirada,
para encontrarme con la tuya
dulce, inocente,
indefensa.

No necesito nada más
para saber que me quieres,
para saber que me necesitas,

No necesito nada más
para ser feliz,
a tu lado,
a vuestro lado.

viernes, 18 de noviembre de 2011

Hace mucho tiempo que perdí
la esperanza de un nuevo amanecer.
Hoy me siento fenecer,
al no saber quien seré, quien soy,
al no recordar quien un día fui
Hace tiempo que me resigné,
a no mirar más allá de mis narices,
a no contar mis muchas cicatrices,
que a lo largo de mi vida curé,
desde mi partida hasta el día de hoy.

Hace tiempo que te amé,
y aún te sigo amando,
os sigo amando,
aunque de amaros
no sepa el porqué,
el cómo,
ni el cuándo.

viernes, 11 de noviembre de 2011

No busco el calor de tus brazos,
ni embriagarme con el suave aroma,
ese rosado perfume,
que emana tu cuerpo.

No aspiro al roce de tus labios,
ni al dulce cáliz de tus besos.
No aspiro a ser herido,
por esa mirada pura y cristalina,
que ilumina mis noches,
que me despierta por las mañanas.

No puedo entender,
el cómo ni el porqué,
el cuando ni el donde,
surgió este mío querer.

Lo que busco,
a lo que aspiro,
vida mía,
es a escuchar de tus labios
que tu también ansías,
que tu también te mueres
por el mío querer.

martes, 1 de noviembre de 2011

¿Dónde están?

¿Dónde están esas risas,
dulces, alegres y tiernas
surgidas al alba?

¿Dónde están?

¿Quién las hizo desaparecer,
a traición,
en esa maldita madrugada?

Mas no me resigno,
y aunque aquellas risas
no vuelvan a amanecer,
nunca verás la sonrisa
de mi cara desaparecer.

sábado, 29 de octubre de 2011

Pasas las horas,
inasequible al desaliento,
velando, cultivando,
recolectando la felicidad,
en este corazón,
antes en barbecho,
ahora florido y hermoso,
que yace en tu bendito pecho.

Pasas las horas
velando mis desvelos,
cumpliendo mis anhelos,
y yo no puedo más que adorarte
desde estas humildes líneas,
desde estos tristes versos.

viernes, 26 de agosto de 2011

Compartes con el mar
Veladas historias de desencuentros,
Historias tristes de marineros muertos
mientras navegaban,
buscando perdidos alguien a quien amar.

Y me miras con ardor guerrero,
Buscando captar mi atención.
¡Oh ciega y amarga pasión
Que enloquece de modo pasajero!

Mas soñando despierto
Durante unos segundos
Recobro la razón,
Para observar el asombroso paisaje,
Alguien dibujando un furibundo oleaje
Que marca el ritmo a mi corazón.

¿Se acabó la primavera?

¿Se acabó la primavera?
Me acerco, ingenuo,
a abrazar el árbol de la vida,
a palpar cada una de sus robustas ramas
buscando acaso en ellas
una señal que simplifique,
una señal que me indique el camino.

Y mientras palpo,
sus flores, antes bellas,
se van marchitando,
las ramas, otrora robustas,
van enfermando,

¿Acaso se marchó la primavera,
o soy yo la señal
de que el perpetuo invierno ha llegado?

Breviario II

Ya se escapa la noche,
llevándose consigo
este alma mía.

Ya regresa el día
y con el amanecen mis recuerdos
los malos momentos
y los buenos,
que siembran de vino y rosas,
el lienzo desdibujado
de esta vida mía.

_______________________

Si la vida es un sueño
del que no quiero despertar,
nunca dejaré de soñar,
pues en mis sueños,´
vida mía, apareces
y de ellos no has de escapar

Siembras

Siembras con tus manos
cariño en mis entrañas.
¡Qué sensaciones extrañas
las que siento a tu lado!

Siembras con tus besos
en los mis labios pasión caliente,
Como calmar esta sed ardiente
de amores perversos.

Siembras con tus caricias
cariño, pasión y calentura.
¡Oh, pobre corazón,
que por ti late con locura!

Inspiración

La mañana,
envuelta en una bruma,
apunta a fría, destemplada.

Es invierno.
Café en mano
me dispongo a escribir un poema.

Como cada mañana,
te beso, te abrazo,
en busca de inspiración,
en busca de aquella inspiración
que, como siempre,
tarda en llegar a la cita con mi pluma.

Pero aparece.

Y mirándome
burlona, sonriente,
me dice: ¡Aquí estoy!
¿me echabas de menos?
Y sí, te echaba en falta.

Ya no apareces en sueños.
Simplemente te materializaste,
convertida en nebulosa,
en volutas te humo
que, de vez en cuando,
humedecen y calientan
mi desierta alma.

SOLEDADES

S olo son sentimientos,
O quizá recuerdos singulares,
L legados de lo más hondo de tu alma,
E scondida y oscura a mis ojos.
D orados destellos
A manecen deslumbrantes,
D espuntando lejanos y amenazantes,
E n el lejano horizonte
S urgidos solo para nuestros ojos.

OLVIDO

Estás ahí,
otra vez a mi lado.

En realidad
siempre estuviste ahí,
a mi vera,
día a día,
apoyándome en mi lucha.

¿Quién eres?
¿Qué quieres?
¿Por qué me besas y me abrazas
sin pedirme nada a cambio?

Ojalá pudiese acordarme
de tus besos,
de tus caricias,
de todos los momentos
vividos a tu lado.

Pero no puedo.
Cada día es un amanecer,
un libro blanco en el que escribir
mis recuerdos evaporados.

Recuerdos que tu me susurras
dulcemente al oído,
uno a uno,
día tras día,
con una sonrisa en la boca,
pese a que yo sé
que tu alma está llorando.

BÚSCAME

Búscame
en la tierna sonrisa de un niño,
entre las redes del marinero,
en los labios de un sentido ‘te quiero’,
en un gesto de cariño.

Búscame
en el tibio sol del atardecer,
en el dulce aroma de las rosas,
en el rojizo sol al anochecer,
entre esas pequeñas cosas.

Me hallarás
entre los aperos del labrador,
entre las líneas de estos versos,
en el arrullador sonido de las olas,
en tus cálidos besos.

En todos esos sitios estaré.
Ven a buscarme.
Te estaré esperando.

.

ALEGRIAS

A manece tu sonrisa
L uciendo en todo su esplendor,
E ncendiendo las almas ajenas y
G ritando que está viva.
R íe y vive feliz,
I nunda tu vida de carcajadas
A ma todo lo que hagas,
S eas quien seas, vayas donde vayas

SONRISAS

S olo cuando te miro
O lvido mis penas,
N avego por la vida
R emando a contra corriente,
I gnorando mi destino.
S i me miras,
A unque sea un instante,
S abré que mi vida mereció la pena.

martes, 23 de agosto de 2011

Si la noche me busca,
que lo haga en tus brazos,
cálidos y acogedores,
que lo haga en los albores
en que se estrechan nuestros lazos.
...
Si la noche me busca
que sea de madrugada,
despierto en tu cama,
fría y desierta
mañaña tras mañana.

Si la noche me busca
que me encuentre encadenado en tu recuerdo
dulce y pasajero,
pensando que quizá
todo fue un sueño.

sábado, 18 de junio de 2011

Olvido

Estás ahí,
Otra vez a mi lado,
En realidad
Siempre estuviste ahí.
Día a día
Apoyándome en mi lucha.


¿Quién eres?
¿Qué quieres?
¿Por qué me besas y me abrazas
sin pedirme nada a cambio?

Ojalá pudiese acordarme
De tus besos,
de tus caricias,
de todos los momentos
vividos a tu lado.

Pero no puedo.
Cada día es un amanecer,
Un libro blanco en el que escribir
Mis recuerdos evaporados.
Recuerdos que tu me susurras
Dulcemente al oído,
Día tras día,
Con una sonrisa en la boca,
Pese a que yo sé
que tu alma está llorando.

miércoles, 5 de enero de 2011

Lluvia

Llueve.
Cae el agua sin importar el mañana.
Llueve
y yo me dejo arrastrar
por la corriente purificadora
que me renueva y que me bautiza,
esperando florecer en primavera.