contenido de la página Recuerdos de Arcadia: 21 de agosto de 2011

viernes, 26 de agosto de 2011

Compartes con el mar
Veladas historias de desencuentros,
Historias tristes de marineros muertos
mientras navegaban,
buscando perdidos alguien a quien amar.

Y me miras con ardor guerrero,
Buscando captar mi atención.
¡Oh ciega y amarga pasión
Que enloquece de modo pasajero!

Mas soñando despierto
Durante unos segundos
Recobro la razón,
Para observar el asombroso paisaje,
Alguien dibujando un furibundo oleaje
Que marca el ritmo a mi corazón.

¿Se acabó la primavera?

¿Se acabó la primavera?
Me acerco, ingenuo,
a abrazar el árbol de la vida,
a palpar cada una de sus robustas ramas
buscando acaso en ellas
una señal que simplifique,
una señal que me indique el camino.

Y mientras palpo,
sus flores, antes bellas,
se van marchitando,
las ramas, otrora robustas,
van enfermando,

¿Acaso se marchó la primavera,
o soy yo la señal
de que el perpetuo invierno ha llegado?

Breviario II

Ya se escapa la noche,
llevándose consigo
este alma mía.

Ya regresa el día
y con el amanecen mis recuerdos
los malos momentos
y los buenos,
que siembran de vino y rosas,
el lienzo desdibujado
de esta vida mía.

_______________________

Si la vida es un sueño
del que no quiero despertar,
nunca dejaré de soñar,
pues en mis sueños,´
vida mía, apareces
y de ellos no has de escapar

Siembras

Siembras con tus manos
cariño en mis entrañas.
¡Qué sensaciones extrañas
las que siento a tu lado!

Siembras con tus besos
en los mis labios pasión caliente,
Como calmar esta sed ardiente
de amores perversos.

Siembras con tus caricias
cariño, pasión y calentura.
¡Oh, pobre corazón,
que por ti late con locura!

Inspiración

La mañana,
envuelta en una bruma,
apunta a fría, destemplada.

Es invierno.
Café en mano
me dispongo a escribir un poema.

Como cada mañana,
te beso, te abrazo,
en busca de inspiración,
en busca de aquella inspiración
que, como siempre,
tarda en llegar a la cita con mi pluma.

Pero aparece.

Y mirándome
burlona, sonriente,
me dice: ¡Aquí estoy!
¿me echabas de menos?
Y sí, te echaba en falta.

Ya no apareces en sueños.
Simplemente te materializaste,
convertida en nebulosa,
en volutas te humo
que, de vez en cuando,
humedecen y calientan
mi desierta alma.

SOLEDADES

S olo son sentimientos,
O quizá recuerdos singulares,
L legados de lo más hondo de tu alma,
E scondida y oscura a mis ojos.
D orados destellos
A manecen deslumbrantes,
D espuntando lejanos y amenazantes,
E n el lejano horizonte
S urgidos solo para nuestros ojos.

OLVIDO

Estás ahí,
otra vez a mi lado.

En realidad
siempre estuviste ahí,
a mi vera,
día a día,
apoyándome en mi lucha.

¿Quién eres?
¿Qué quieres?
¿Por qué me besas y me abrazas
sin pedirme nada a cambio?

Ojalá pudiese acordarme
de tus besos,
de tus caricias,
de todos los momentos
vividos a tu lado.

Pero no puedo.
Cada día es un amanecer,
un libro blanco en el que escribir
mis recuerdos evaporados.

Recuerdos que tu me susurras
dulcemente al oído,
uno a uno,
día tras día,
con una sonrisa en la boca,
pese a que yo sé
que tu alma está llorando.

BÚSCAME

Búscame
en la tierna sonrisa de un niño,
entre las redes del marinero,
en los labios de un sentido ‘te quiero’,
en un gesto de cariño.

Búscame
en el tibio sol del atardecer,
en el dulce aroma de las rosas,
en el rojizo sol al anochecer,
entre esas pequeñas cosas.

Me hallarás
entre los aperos del labrador,
entre las líneas de estos versos,
en el arrullador sonido de las olas,
en tus cálidos besos.

En todos esos sitios estaré.
Ven a buscarme.
Te estaré esperando.

.

ALEGRIAS

A manece tu sonrisa
L uciendo en todo su esplendor,
E ncendiendo las almas ajenas y
G ritando que está viva.
R íe y vive feliz,
I nunda tu vida de carcajadas
A ma todo lo que hagas,
S eas quien seas, vayas donde vayas

SONRISAS

S olo cuando te miro
O lvido mis penas,
N avego por la vida
R emando a contra corriente,
I gnorando mi destino.
S i me miras,
A unque sea un instante,
S abré que mi vida mereció la pena.

martes, 23 de agosto de 2011

Si la noche me busca,
que lo haga en tus brazos,
cálidos y acogedores,
que lo haga en los albores
en que se estrechan nuestros lazos.
...
Si la noche me busca
que sea de madrugada,
despierto en tu cama,
fría y desierta
mañaña tras mañana.

Si la noche me busca
que me encuentre encadenado en tu recuerdo
dulce y pasajero,
pensando que quizá
todo fue un sueño.